– Descubir la magia de los bosques de Taramundi y sus forjas tradicionales
– Pasear por bosques autóctonos hasta llegar al Monumento Natural de las Cascadas de Oneta y la Cascada de México
– La herencia del hierro y los bosques de Froseira
– Lugar sagrado en Pastur
– Perderse en la Reserva de la Biosfera del Río Eo, Oscos y Terrás de Burón
– Días de playas de arena: Tapia, Peñarronda, Serantes, Frejulfe, La Paloma o Navia
– Oliendo a mar y pesca en los puertos de Tapia, Puerto de Vega, Luarca o Rïnlo
– Entre Galicia y Asturias en barca: navegando por la ría del Eo
– Diversión asegurada: Haciendo surf y actividades acuáticas en cualquiera de las playas de la zona
– Unos golpes en los campos golf de Rapalcuarto o de Castropol
– Disfrutar de las jornadas gastronómicas, fiestas y festivales que inundan la zona en verano
– Vistar las cuevas de Andína
– Una tarde en el circuito de Kartin
– Probar la sidra, bebida típica asturiana en cualquier sidrería de la zona
– El mejor percebe del mundo
– Formas rocosas caprichosas en la Playa de las Catedrales (marea baja)
– Una excursión de una hora hasta Estaca de Bares, la punta más septentrional de la peninsula ibérica
– Disfrutar de una buena tapa de pulpo a la gallega
– El atardecer y la noche de Tapia de Casariego en su puerto
– Visitar los Lagos de Silva, antiguas explotaciones auríferas de los romanos
– Horizonte, vistas y acantilados desde el Cabo de San Agustín
– Una fabada en un día fresco y gris